En el Blog de Zona Táctica hemos visto cómo identificar los diferentes tipos de hemorragias. Recuerde, saber cómo actuar ante una herida sangrante es de vital importancia. En este artículo hablaremos sobre actuaciones ante las hemorragias exteriorizadas.

Las hemorragias exteriorizadas se producen cuando existe una hemorragia interna y la sangre sale por orificios naturales de nuestro cuerpo.

Existen casos en que siendo imposible controlar la hemorragia, la actuación consistirá en evitar el empeoramiento del lesionado. Veamos cómo actuar ante los diferentes casos:

Hemorragias de oído

Para auxiliar a la víctima su actuación debe ir encaminada a facilitar la salida de sangre de la cavidad craneal, por lo contrario, la masa encefálica será comprimida por la invasión sanguínea pudiendo ocasionar lesiones irreversibles en el cerebro. Por tanto, para facilitar la salida de la sangre, debe colocar a la víctima en Posición Lateral de Seguridad (P.L.S.), con el oído sangrante dirigido hacia el suelo. Monitorice sus constantes vitales hasta su evacuación.

Cuando la pérdida de sangre es abundante y previamente ha existido un traumatismo en la cabeza, el origen de la hemorragia suele ser la fractura de la base del cráneo.

Hemorragias de nariz

El origen de estas hemorragias es diverso, pueden ser producidas por un golpe, por un desgaste de la mucosa nasal, o como consecuencia de una patología en la que la hemorragia es un signo, como podría ser en el caso de la hipertensión arterial (HTA).
Para detener la hemorragia, se debe efectuar una presión directa sobre la ventana nasal sangrante y contra el tabique, durante 5 minutos. La cabeza debe inclinarse hacia adelante, para evitar la posible inspiración de coágulos. Pasados los 5 minutos, se aliviará la presión para comprobar si la hemorragia ha cesado. En caso contrario, se introducirá una gasa mojada en agua oxigenada por la fosa nasal sangrante realizando un taponamiento. Si la hemorragia no se detiene deberá ser evacuado por los servicios de emergencia.

Hemorragias en la boca

Cuando la hemorragia se presenta en forma de vómito, puede tener su origen en el pulmón (hemoptisis) o en el estómago (hematemesis). Es esencial distinguir su origen para así ofrecer un tratamiento correcto. Para ello tenga en cuenta el siguiente cuadro:

En ningún caso se debe ingerir ningún tipo de alimento mientras dure el sangrado.

Sangrado por otros orificios

Para las hemorragias producidas por lesiones internas en las que la sangre sale por los otros orificios naturales restantes, difícilmente podrá controlarlas. Por tanto, deberá monitorizar las constantes vitales de la víctima y remitirla a los servicios de urgencias cuanto antes.