La marca HESCO está reconocida internacionalmente como un icono en protecciones balísticas y sistemas de seguridad. Está especializada en barreras defensivas, refugios, búnkeres, sistemas de despliegues rápidos y material balístico para los sectores de la defensa y la energía; suministrando a clientes como el Ejército de EE. UU., las Fuerzas de Tierra de Emiratos Árabes Unidos, Naciones Unidas y el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
Todo comenzó en 1989, de la mano del emprendedor inglés Jimi Heselden; quien desarrolló un innovador sistema defensivo para proteger casas familiares que se enfrentaban a ser destruidas por feroces tormentas. Estas barreras protectoras consistían en gaviones de malla de alambre con revestimiento de geotextil; estando caracterizados por un despliegue rápido y reducir las cargas logísticas ante una emergencia. Desde entonces se han ganado la confianza de muchas unidades de las fuerzas armadas, cuerpos de seguridad y organizaciones medioambientales.
Durante todos estos años, los concertainers han seguido siendo muy demandados tanto para defensa ante inundaciones como para fortificaciones militares. Algunos ejemplos de usos más recientes son:
Cabe añadir que, con el paso del tiempo, la empresa HESCO ha ido desarrollando otras líneas de negocio como seguridad fronteriza, soluciones de mitigación frente a vehículos hostiles y protección balística. Además, mantienen su afán innovador aplicando el uso de nuevas tecnologías; ya sea en una barrera de tierra o una placa antibalas.
En este sentido, destacan varios proyectos:
HESCO Bastion Limited cuenta con un equipo de trabajadores muy experimentados que se implican en todo el proceso, desde su diseño y fabricación hasta la realización de diversas pruebas de campo. Asimismo, dispone de personal cualificado en Europa, Oriente Medio, Estados Unidos y Asia. Respecto a sus valores destacan: integridad, liderazgo, transparencia, colaboración, honestidad y rigurosidad en sus controles.
También debemos resaltar su apuesta por reducir el impacto medio ambiental, tratando de buscar formas de disminuir los desechos a lo largo del ciclo de vida de sus productos. Así como su compromiso por abolir la esclavitud y la trata de personas, asegurándose de que en todas las partes de su negocio o cadena de suministro se cumpla con la Declaración contra de Esclavitud Moderna de 2015.
Las placas balísticas HESCO han estado al lado de hombres y mujeres del ejército durante más de 20 años. En la actualidad, también centran sus esfuerzos en proteger a las fuerzas del orden público con la línea de placas resistentes a las balas de última generación. En consonancia con esto, sus productos están diseñados para superar los rigurosos estándares del Instituto Nacional de Justicia de USA (NIJ). Estas pruebas se realizan en laboratorios de prestigio mundial bajo los protocolos más estrictos, y consisten en:
En cuanto al proceso de fabricación, este se lleva a cabo en Aberdeen y Washington (Estados Unidos). Y para ello usan los mejores materiales como el foam, la cerámica o la tecnología Honeywell Spectra; forrados con un tejido de Cordura y, en ocasiones, recubierto de Rhino liner.
Por otro lado, entre sus diseños sobresalen los que disponen de múltiples curvas; los cuales se adaptan al torso de manera más ergonómica y facilitan la movilidad. Mientras que los de una sola curva tienen un diseño más simple y han sido optimizados para ofrecer una gran comodidad.
Respecto al corte, tienen varias opciones:
Por último, mencionaremos las diferentes líneas que tienen en el mercado:
